En el infierno había unas zapatillas de correr

Tenía pendiente enseñaros el segundo mural del proyecto Dibujando la Palabra, esta vez en Valladolid. Y aunque ahora estamos todos en modo navidades voy a aprovechar para así despedir el año y desearos lo mejor para el que vamos a estrenar.

En el IES Ramón y Cajal de Valladolid los alumnos trabajaron el precioso poema de Rosa Chacel "En el infierno había un violoncello". La poesía me cuesta, lo confieso, pero de tanto escribir este soneto acabé por adorarlo:


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Pero no puedo continuar sin mencionar antes que este mural coincidió con el asesinato de Laura Luelmo. Qué decir que no se haya dicho ya. Fue una semana llena de rabia y dolor y creo que todo esto quedó un poco reflejado en la pared. Un poema escrito por una mujer, dedicado a otra, mujeres protagonistas del dibujo y mujer quien lo diseña y pinta (hace poco toqué este tema en otro post). Y Laura, licenciada en Bellas Artes, maestra de plástica, corredora, mujer. Estas noticias duelen siempre, pero los detalles que te conectan con la víctima te parten el corazón.

En el infierno de Rosa Chacel había un violonchello. En el que pintaron los chicos,  fuego y aviones de guerra. En el de Laura, sus zapatillas de correr y un monstruoOjalá una sociedad en la que estos monstruos se pudran en su propio infierno. Que no todo el mundo se merece una segunda oportunidad. Entiendo que no es fácil decidir cuándo sí y cuándo no, pero el derecho a la reinserción no debería prevalecer sobre el derecho a la vida de personas inocentes. Pobre Laura, y pobres tantas.



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No me enrollaré con la dinámica del proyecto porque ya os la expliqué bien en el post anterior y el proceso de los murales también lo conocéis bien. Primero, los dibujos de los alumnos a partir del texto elegido. Que en este caso nos sorprendieron a todos por su calidad y expresividad:


Y a partir de ellos realicé el diseño que adornaría la pared principal del salón de actos. Que, entre nosotros, falta le hacía. (¿Alguna vez estuvieron de moda las paredes entre marrón y caqui? Si es así por favor que no vuelvan!).


Loca de alegría por pintar calentita (llevaba semanas soñando con este momento), fondeé la pared, dibujé y marqué colores, y realizamos el taller con los alumnos:





Remates, perfilado, caligrafía... Aún quedan tres paredes color camel pero algo hemos avanzado!








Gracias IES Ramón y Cajal.
Por las facilidades, el entusiasmo, la ayuda, la calefacción.
Me encantó compartir unos días con vosotros.

Y mil gracias a mi padre por las fotos :)

Próximas paradas, Zamora y Soria en marzo.


Muy feliz 2019 a todos,


Si te ha gustado esta idea y estás imaginando un cole a todo color, escríbeme a hola@azulpatio.com y estaré encantada de darte más información, preparar un presupuesto sin compromiso o pasar un día para conocernos.

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